Córdoba está cada día más cara, más insegura y más vulnerable. Incluso, esta semana se viene hablando del aumento de impuestos y tarifas por parte del gobierno de Córdoba, que encabeza Juan Schiaretti. Algunos, ya le llaman “tarifazo”, ya que las facturas de la luz y del agua van a venir más abultadas. Eso sí: los aumentos no son proporcionales a la calidad del servicio.
¿Quién puede soportar en este contexto el aumento de impuestos en Córdoba? ¿Cómo hacemos los cordobeses y cordobesas para soportar estos aumentos en un contexto tan complejo? ¿Dónde queda el discurso y el marketing del Gobierno de la Provincia frente a estos aumentos?
Sin dudas, un gobernador como Schiaretti que está sumido en un silencio que aturde, ha perdido el rumbo y parece que su único plan es seguir incrementando las tarifas y los impuestos en momentos en que en Argentina, para no caer en la pobreza, una familia necesita más de 50.000 pesos mensuales.
No solo se trata de los aumentos mencionados, también se habló por estos días de posibles subas en la tarifa del transporte y del peaje, en un contexto de gravedad marcado por la inseguridad, la pobreza y el desempleo.
Mientras tanto, los gastos superfluos en propaganda política no se detienen. Basta con ingresar a YouTube o a las redes sociales para que las interrupciones de avisos publicitarios de la Provincia nos invadan. Esos avisos son los que nos muestran una Córdoba que no es real; una Córdoba donde nos muestran que la pobreza, el aumento de tarifas, la falta de educación y la inseguridad no existen.
Sepa, gobernador Schiaretti, que este no es el camino. Que no solo se puede exigir responsabilidad a los cordobeses y cordobesas, cuando desde el mismo Estado Provincial no existe empatía y cuando la inseguridad, el silencio y el tarifazo nos quitan oportunidades en cualquier rincón de la provincia. Córdoba está cada vez más cara e insegura: no importa cuando leas esto.