El presidente del Comité provincial de la UCR Alberto Zapiola rubricó cerca del mediodía un documento institucional de compromiso por la paz, en el contexto del paro de transporte decretado por UTA y por tiempo indeterminado, fuera de toda razonabilidad y de respeto a las instituciones.
Diversos sectores representativos de la ciudad de Córdoba (legisladores provinciales como nacionales, autoridades religiosas, trabajadores y empresarios), firmaron en el Salón Rojo del Cabildo Histórico un documento de compromiso con la paz.
“Los abajo firmantes, ciudadanos comprometidos y preocupados por la paz social, único objeto que nos insta a expresarnos y solicitar a las autoridades, a los representantes de los trabajadores y a los empresarios, en el marco de las instituciones y del diálogo que garantiza la democracia”, expresa el párrafo inicial del documento suscripto masivamente.
“Estando convencidos que en este momento la sociedad cordobesa necesita de su atención y comprensión, y del poder asegurar el desarrollo de la vida y el pleno ejercicio de los derechos de todos los ciudadanos. Comprendiendo que los derechos conllevan obligaciones y respeto del derecho de los demás actores sociales para asegurar la convivencia armónica en una sociedad”, añade el mismo texto acompañado por Zapiola.
Posteriormente, el escrito resalto lo siguiente:
- Manifestamos también el derecho constitucional de los trabajadores a realizar huelgas, pero nunca poniendo en riesgo el desarrollo de los derechos mínimos esenciales de los demás, que también son derechos constitucionales, tales como acceso a la salud, la educación, la justicia, el trabajo, entre muchos otros.
- Creemos firmemente que no hay conflicto, cualquiera sea la naturaleza, que no se puede encauzar con diálogo,concordia y buscando el consenso en un marco de legalidad y respeto por las instituciones democráticas. Y no prolongando la agonía de los usuarios, principalmente de los ciudadanos que necesitan y requieren del transporte público para desarrollar su vida en plenitud.
- Las instituciones, la democracia, la paz social son inmensamente superiores y debemos ejercer obligatoriamente la gestión moral e institucional de vincularnos a pedir que sea cuidado el pacto ciudadano y se desarrollen los plenos derechos; como representantes de diversos sectores estamos conminados a la acción y a un llamado maduro de la instauración de la pacificación social y solicitar a aquellos representantes sectoriales que desean colaborar con los derechos de los trabajadores sea en el marco de una mesa de consenso y aportando ideas para arribar a soluciones.